La vendimia en el Penedés va de finales de agosto hasta mediados de octubre y las tres variedades autóctonas son el Macabeo, Xarel·lo y Parellada. Una vez la uva es cosechada y seleccionado se prensa y así obtenemos el mosto, que una vez ha hecho la primera fermentación se convertirá en vino base.

Llegado a este punto, el enólogo se encarga de hacer el coupage, que es la mezcla de las diferentes variedades de vino. Hecho el coupage, se llenan las botellas con este vino y también se añaden azúcares y levaduras. Las botellas pasarán un tiempo en reposo y tranquilidad dentro de las cavas, en nuestro caso un mínimo de 2 años a un máximo de 5. Durante este tiempo, dentro de la botella las levaduras producirán la segunda fermentación que convertirá el vino en cava, este proceso conlleva la aparición de una pequeña cantidad de sedimentos.

El último paso es el Degorg, consiste en la eliminación de estos sedimentos y es en este momento donde también se puede añadir una pequeña cantidad de licor para obtener los diferentes tipos de cava. Así pues, según la cantidad final de licor que se añade tendremos un cava semi-seco, Brut o Brut Nature.